Ya están aquí las nuevas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) y han venido para quedarse. Desde este 1 de enero del 2023, un total de 149 ciudades repartidas por todo el territorio español deben instalar este tipo de restricciones a la movilidad contempladas dentro del plan de reducción de emisiones contaminantes de la Unión Europea.
La nueva norma afecta a todos los núcleos de población que superen los 50.000 habitantes o aquellos de 20.000 habitantes cuyos criterios de calidad de aire sean negativos.
Los vehículos sin etiqueta lo más perjudicados
Se estima que más de nueve millones de vehículos se verán afectados en toda España por este tipo de restricciones. Especialmente, aquellos conductores cuyos vehículos no dispongan de etiqueta medioambiental que tendrán prohibido el acceso a las zonas urbanas desde este mismo 1 de enero.
Son los ayuntamientos los encargados de determinar las restricciones a sus núcleos urbanos. La mayoría se regirán en función de las etiquetas medioambientales marcadas a nivel nacional por la DGT: etiqueta B, C, ECO y 0.
España, muy lejos de la transición
España tiene una de las flotas de automóviles más antiguas de Europa. De hecho, la media de edad de los vehículos en España se encuentra actualmente en los 13,49 años. Datos que nos indican que al menos el 33,2% de los vehículos que se encontraban en circulación en el país en el año 2021 no disponía de etiqueta medioambiental.
Con el cierre del año pasado, se catalogaron que de 10 millones de vehículos en España no contaban con etiqueta; 9.4 millones con etiqueta B; 9.5 millones con etiqueta C y tan solo 804.210 con etiqueta ECO y 162.071 con etiqueta CERO.
Sin embargo, no todo son malas noticias. Con las implementaciones de Zonas de Bajas Emisiones en las principales ciudades contaminantes como Madrid y Barcelona, las calidad del aire ha mejorado. De hecho, es una tendencia constante desde el año 2019.
¿Qué coches compran los españoles para el cambio?
Las matriculaciones de vehículos alternativos aumentaron el pasado año en un 55.2% en comparación con el año 2020. Se vendieron 312.295 vehículos. De hecho, los coches alternativos supusieron el 30% de la cuota de mercado en el 2021.
Los híbridos enchufables son los que más interés han suscitado. Sus ventas han crecido en un 85.4% respecto al 2020 con un total de 43.317 unidades.
Sus competidores directos, los 100% eléctricos, han bajado en interés. Sin embargo superaron los 71.000 vehículos vendidos y más de un 80% de ellos fueron turismos. Sus ventas aumentaron en un 63% y representaron un 7% del mercado total en España.
Por último, los vehículos de gas licuado de petróleo parece que han empezado a posicionarse positivamente en el mercado. Se vendieron cerca de las 15.350 unidades, un 34.32% más que en el 2020. Además, se estima que muchos conductores han realizado modificaciones en sus vehículos para poder instalar este tipo de combustibles como método contra el aumento del precio en la gasolina.